Trabajo Digno Para una Sociedad Decente. Convocados por la Asociación Pro-Derechos Humanos de Andalucía, la HOAC de Sevilla ha participado en la organización de la conmemoración del 10 D, DÍA INTERNACIONAL POR LOS DERECHOS HUMANOS, con nuestra campaña TRABAJO DIGNO SOCIEDAD DECENTE, haciendo presente este derecho tan importante en la convocatoria y desarrollo del acto.
Los numerosos colectivos que han coorganizado el acto hemos atravesado el centro de la ciudad, lleno de gente que realizaba compras navideñas, con nuestras reivindicaciones vinculadas distintos reclamaciones: vivienda, salud, legalidad para los migrantes, no a la guerra, solidaridad contra la pobreza... todo bajo el lema POR UNA VIDA DIGNA: DERECHOS PARA TODXS. El acto ha concluido con la lectura de las distintas organizaciones explicando sus reclamaciones.
El acto ha tenido hueco mediático y distintas emisoras de televisión (Cuatro, Canal Sur) lo han cubierto, podéis ver en el facebook de la HOAC o en el de APDH Sevilla.
A continuación podéis leer la intervención que tuvimos desde la HOAC:
"En todo el mundo el trabajo se
ha convertido en mercancía a pesar de ser la actividad principal con capacidad
de crear riqueza y dignificar al ser humano. Esto ha generado mucha pobreza y
desigualdad: El 10% de la población mundial acapara el 85% de la riqueza
mundial y, de ellos, el 1% concentra el 50% de toda la riqueza.
Algunas manifestaciones de este problema en Sevilla y en Andalucía
son: En Sevilla, el 27,1% está en paro. 89.900 hogares tienen a todos sus
miembros desocupados, 196.800 personas viven en estos hogares. El 33,60 % de
los que trabajan tienen un contrato temporal y 96.900 están subempleados. En
Andalucía, el 29,07 está en paro (1.161,100 personas). Casi un millón de
personas (894.400) viven en hogares en los que todos están parados. El 35,6% de
los que trabajan tienen un contrato temporal, y 364.900 son subempleados. Esto
es especialmente preocupante en el caso de los jóvenes andaluces: El 68,8 % de
los jóvenes entre 16 y 19 años y el 56,7% de los que tienen entre 20 y 24 años
están parados.
El desempleo, la precariedad y la pérdida creciente de los
derechos asociados al trabajo han deteriorado gravemente la vida personal y
social y son un atentado contra la dignidad de la persona. El problema es que
esta nueva realidad del trabajo ha venido para quedarse, y no puede haber
solución cuando el empleo que se crea es precario, mal pagado y sin derechos.
Las causas profundas de esta situación se encuentran en un sistema económico
mundial que subordina la dignidad de la persona al dinero. No habrá solución
para este problema sin denunciar a este sistema y a las instituciones
nacionales e internacionales que lo apoyan y lo defienden. Es necesario exigir
la prioridad del trabajo sobre el capital para construir un trabajo digno.
Para que un trabajo sea digno se exige que sea:
- un trabajo libremente elegido, que asocie a los trabajadores, hombres y mujeres, al desarrollo de su comunidad.
- que haga que los trabajadores sean respetados, evitando toda discriminación.
- que permita satisfacer las necesidades de las personas y escolarizar a los hijos sin que se vean obligados a trabajar.
- que permita a los trabajadores organizarse libremente y hacer oír su voz.
- que deje espacio para reencontrarse adecuadamente con las propias raíces en el ámbito personal, familiar y espiritual.
- que asegure una condición digna a los trabajadores que llegan a la jubilación o padecen enfermedad."